
Es necesario volar, sentir el viento
Escaparse entre las nubes,
Sentarnos sobre las espumas de algodón
Y desde allí ver el mar.
Te liberas del miedo a caer,
Te aferras al deseo de libertad
Y si caes, puedes decidir pescar las chispas de sol que esconde el Mar,
Te liberas de la duda, las penas,
Lo llorado, lo que te pesa
Te llenas de vida, de luz,
Y sin vientos, sin alas, vuelas…
Te acompaña el único y simple deseo de encontrarte,
En lo infinito, en lo profundo, donde te escondes.
El sonido de las olas me recuerda que la soledad no existe,
Que aún hay peces que danzan al compás de los astros,
Que las estrellas nunca mueren.
Donde estás es aquí y ahora,
Todo es presente, eso que vives,
Y el aire que respiro
trae olor a menta, Café, yerba buena,
todo condesando en un suspiro.
Bennalice Katz
© Todos los derechos reservados
Comentários